Toda persona se mueve por ilusiones, por ansia de alcanzar sus sueños...
Algunos quieren de algún modo llegar a marcar su huella en el mundo, otros viajar por el globo con una mochila a la espalda, y otros sencillamente vivir en un piso sin hipoteca y feliz al lado de una pareja y algún que otro retoño...
Nosotros no...
Nosotros anhelamos despertarnos algún día de repente en un futuro distópico siendo el elegido para manipular un robot gigante, con una recortada y una sierra mecánica en un apocalipsis zombie o siendo el octavo hijo en un mundo de capa, espada y brujería.
Soñamos con aparecer en el Saloon en el momento justo masticando un cigarro apagado, con el sombrero calado casi hasta las cejas y las manos acercándose lentamente a los revólveres de las cartucheras y exclamando duramente: "¿Quién es el dueño de ésta pocilga?". Éste sueño se multiplica infinitesimalmente si vamos a salvar a la chica o si sustituimos los revólveres por katanas o un sencillo "Snikt".
Soñamos con calzarnos unos tirantes, una pajarita y viajar en nuestra TARDIS en busca de nuestra River Song (véase también Rose Tyler) particular, o naufragar en una extraña isla y descubrir que el único modo de no morir por viajes bruscos en el tiempo a causa del electromagnetismo es que ella sea "tu constante". Esperamos a que nuestra Olivia sea capaz de arriesgar su vida viajando entre universos para rescatarnos de las garras de nuestro padre universicida.
Añoramos que después de una situación cómica en nuestras vidas, escuchemos risas enlatadas.
Que haya un cliffhanger al final de cada día.
Que la season finale de la última temporada acabe atando todos los cabos sueltos y contente a la mayor cantidad de gente posible.
Y que la música suba cuando finalmente bajo la intensa lluvia besemos a la chica.
Aunque parezca mentira, algunos lo consiguen...
Si la vida fuese una serie, yo elijo ésta
